Octubre, Mes de Sensibilización del Cáncer de Mama
Escrito por Radio Turquesa el Oct 4, 2016
Octubre es el mes de sensibilización del cáncer de mama, se celebra en todo el mundo cada octubre, aumentando la atención y el apoyo a la concientización, detección temprana, tratamiento y cuidados paliativos. Grupo Turquesa se suma a esta campaña apoyando a las mujeres a que detecten algún síntoma a tiempo.
Durante este mes se invita a portar un listón o moño rosa, que es el símbolo internacional usado por personas, compañías y organizaciones que se comprometen a crear conciencia sobre el cáncer de mama y mostrar apoyo moral a las mujeres con esta enfermedad.
El primer listón o lazo rosa fue utilizado en el otoño de 1991, cuando la Fundación Susan G. Komen los obsequió a los participantes de una carrera en la ciudad de Nueva York, en alusión a los sobrevivientes del cáncer de mama.
Los conocimientos actuales sobre las causas del cáncer de mama son insuficientes, por lo que la detección temprana sigue siendo el punto más importante de la lucha contra esta enfermedad. Cuando el cáncer de mama se detecta en una etapa temprana, las posibilidades de curación son elevadas, si se detecta tardíamente es raro que se pueda ofrecer un tratamiento curativo. En estos casos los cuidados son necesarios.
El cáncer de mama puede aparecer tanto en hombres como en mujeres. Sin embargo, más del 99 por ciento de los diagnósticos ocurre en mujeres.
Al igual que en otros cánceres la causa o causas que provocan el cáncer de mama no se conocen.
No obstante, los especialistas han identificado los factores de riesgo que predisponen a desarrollar la enfermedad:
• Edad: Es el principal factor de riesgo. A medida que la mujer se hace mayor tiene más posibilidades de padecer cáncer de mama.
• Genética: Las mujeres con antecedentes familiares de cáncer de mama tienen más riesgo. Éste se incrementa si el familiar es la madre, hermana o hija.
• Factores reproductivos: Aquellos agentes que aumentan la exposición a los estrógenos endógenos, como la aparición temprana de la primera regla, la menopausia tardía o el uso de terapia hormonal sustitutiva después de la menopausia aumentan el riesgo de cáncer de mama. No haber dado a luz nunca también está relacionado con este cáncer.
• Radiaciones ionizantes: La exposición a este tipo de radiaciones, especialmente durante la pubertad, aumenta la posibilidad de tener cáncer de mama.
• Obesidad: Acumulación excesiva de grasa en el cuerpo, tener un peso por arriba del indicado según su complexión y estatura.
• Consumo de alcohol. El consumo excesivo de alcohol podría ser también una de las causas.
Síntomas
La manifestación más frecuente que ayuda a detectar el cáncer es la aparición de un bultito (nódulo palpable) que generalmente no causa dolor. Otros síntomas frecuentes son las alteraciones de la piel de la mama o la retracción del pezón.
Prevención
La autoexploración y las mamografías son las herramientas más útiles para encontrar bultos sospechosos en las mamas. En general, la técnica de la mamografía facilita la detección de pequeños bultos, difíciles de predecir mediante la palpación del pecho. Este tipo de prueba debe repetirse anualmente a partir de los 50 años, o de los 45 en el caso de que una persona tenga antecedentes familiares de cáncer de mama de primer grado.
Tipos
No todos los bultos que aparecen en las mamas son un síntoma de cáncer. De hecho, nueve de cada diez bultos son benignos. Estos bultos no cancerosos pueden ser fibrosis o tumores de tejido conectivo y glandular, o bien, quistes o bolsas llenas de líquido.
Los tumores benignos de mama (fibroadenomas) no constituyen un peligro para la vida y suelen tener fácil tratamiento.
Diagnóstico
El proceso de diagnóstico del cáncer de mama comienza cuando existe la sospecha por la exploración física o una mamografía de rutina. A partir de ese momento el especialista puede realizar una serie de pruebas que confirmen el cáncer:
• Mamografías: Imágenes de rayos X que detectan zonas anómalas de la mama. Estas pruebas no son fiables al cien por cien y pueden ofrecer imágenes sospechosas que al final no son malignas o no detectar un tumor maligno.
• Ecografía: Permite distinguir lesiones quísticas (rellenas de líquido) de lesiones sólidas. Esta técnica suele completar a la mamografía.
• Resonancia magnética nuclear (RMN): Es una exploración radiológica que utiliza la acción de un campo electromagnético para obtener imágenes. La RMN se utiliza como prueba complementaria de las dos anteriores o para analizar el cerebro o la médula espinal.
Si tras realizar estas pruebas la sospecha continúa, el siguiente paso que dará el especialista será la confirmación del cáncer realizando una biopsia.